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Grupo de hermanos evangélicos de Benavente y comarca con motivo de la inauguración de la Capilla en Benavante en 1932 |
Por Rafael González Rodríguez y Víctor Iturbe Martínez
"Asambleas de hermanos" (AA. HH.), "Hermanos de Plymouth" o "Hermanos abiertos", son algunas de las denominaciones con las que se conoce el movimiento congregacionista protestante surgido en Dublín (Irlanda) hacia 1826. En su origen, se presentaba como una alternativa para un sector crítico con la excesiva ritualización que estaba adquiriendo el culto anglicano.
Los primeros pasos de las Asambleas de Hermanos en Zamora han sido glosados por David y Luis Santamaría del Río en su obra "Los otros creyentes". Su asentamiento en la provincia parece documentarse desde principios del siglo XX y se relaciona con la actividad de los misioneros ingleses Guillermo Willies y Arturo Shallis. El primer núcleo misionero se localiza en Barcial del Barco, donde existía una parada del ferrocarril, y cierto jefe de estación comenzó a interesar a los vecinos en el conocimiento del Evangelio. Desde Barcial el núcleo originario se extiende a Castrogonzalo. Arturo Shallis trasladó aquí su residencia y acondicionó un pequeño espacio para reuniones.
Otra de las figuras destacadas en la actividad de la comunidad protestante en la comarca en estos años será el veterinario Audelino González Villa (1901-1984). Según las notas biográficas publicadas por su hijo, Rodolfo A. González Vidal, había sido bautizado por inmersión en la iglesia evangélica de Toral de los Guzmanes en 1919, junto con Abigail Vidal Somoza, la mujer con la que años después formaría su familia. Su suegro, Ventura Vidal, fue uno de los colportores de la región, originario de Jiménez de Jamúz. En 1927 tomó posesión de la plaza de veterinario de Fuentes de Ropel, lo cual le permitió frecuentar y atender a la iglesia evangélica de Castrogonzalo. Colaboró, igualmente, con Arturo Shallis en sus predicaciones en La Torre del Valle y Benavente. Fue también un reconocido bibliófilo, llegando a poseer una riquísima colección de biblias antiguas y modernas, unas 15.000 en total, así como libros antiguos de veterinaria.
Tanto Shallis como González Villa contribuyeron de forma decisiva al mantenimiento y la expansión de la Obra, ministrando de una forma frenética en el entorno de Benavente y su comarca. Se les documenta con frecuencia atendiendo a las congregaciones locales, participando en actos religiosos, visitando a los enfermos y asistiendo a funerales. La creciente presencia pública de los protestantes en la vida social de estos pueblos no fue bien acogida por todos, y dio lugar episodios de tensión con las autoridades eclesiásticas y civiles. En Castrogonzalo, la celebración de un entierro en 1930 originó roces con el cura párroco, y con una "autoridad local", que acabaron en el juzgado:
"El lunes 24 de noviembre tuvo lugar, en Castrogonzalo (Zamora), el entierro de una fallecida hermana de aquella congregación, al cual asistieron buen número de creyentes de La Torre y Pobladura del Valle y una gran concurrencia de amigos y vecinos, que no se habían dejado intimidar por las conminaciones del cura párroco en su sermón del Domingo. La importante manifestación de simpatía y de interés por el Evangelio provocó el enojo de alguna autoridad local, que asistió al acto, interviniendo de una manera irrespetuosa y arbitraria. Con la gorra calada hasta las orejas, se creyó con derecho a determinar el momento en que había de darse tierra al cadáver, sin esperar a que se celebrara, con el orden debido, el culto de sepelio. El pastor, D. Arturo Shallis, acompañado de D. Audelino G. Villa, han visitado al juez de Instrucción, en Benavente, para hacer la correspondiente denuncia contra la conducta de la mencionada autoridad local. Es de esperar que la justificadísima queja sea atendida para enseñanza de gente que no acaba de aprender cómo deben respetarse las convicciones religiosas y los derechos de ciudadanos honrados".
Además de la actividad estrictamente pastoral, Shallis y González Villa promovieron la celebración de conferencias o "mítines" que gozaban de una especial aceptación entre el círculo de creyentes y simpatizantes. Estos actos eran una oportunidad para desplegar sus reconocidas dotes de oratoria. Cuando las circunstancias lo permitían, se invitaba a participar a personalidades relevantes de otras congregaciones o a misioneros que se encontraban visitando la región en aquel momento. A modo de ejemplo, contamos con la siguiente nota de prensa recogida en la revista "España evangélica" en el año 1932:
"Fuentes de Ropel (Zamora). El pasado Jueves Santo tuvo lugar, al aire libre, en esta villa campesina, un mitin de afirmación evangélica. Dio principio al acto el Sr. González Villa, veterinario municipal de la localidad, poniendo de relieve lo que debe España a la despótica y anticristiana Iglesia de los papas. Hace constar que, contra lo que algunos piensan, vienen a realizar un acto de afirmación del Evangelio eterno, porque para escarnecerlo se sobran — dice — esos actos idolátricos que en estos días se celebran. Le sigue el Sr. Shallis, de Castrogonzalo, narrando algunas de las dificultades con que ha tropezado la profesión de evangélico en la España contemporánea y termina haciendo un llamamiento al público para que acepte al Cristo de los Evangelios. Acto continuo hace uso de la palabra el señor Conde, de Santo Tomé, quien dice que a la conducta viril de los soldados evangélicos se debe la conquista para España de muchas libertades, terminando con un discurso sobre el pecado, sus consecuencias y medio de librarse de la última: la condenación eterna. Se repartieron centenares de Tratados y Evangelios, que el público arrebató ávidamente, y muchos mostraron deseos de que se les siga hablando de estas cuestiones".
Entre 1930 y 1931 el Papa Pío XI, por medio del Secretario de Estado, pide al Nuncio Tedeschini un informe exacto y completo de las diversas confesiones cristianas en la Península. De fondo está presente una creciente preocupación de la Iglesia por el desarrollo del protestantismo en España. El informe hace un recuento de los protestantes españoles y extranjeros en cada una de las diócesis. En la diócesis de Astorga se señala que se cuentan, desde 1912, seis españoles en Castrogonzalo; en Torre del Valle, ocho españoles "que por enemistad con el párroco llamaron a los protestantes; en Barcial del Barco, no hay prosélitos, pero el pastor va dos veces a la semana". La transcripción de este documento por José Ramón Hernández Figueiredo revela otros interesantes datos sobre la actividad de la comunidad en nuestra localidad en vísperas de la II República:
"Se cuentan una (capilla) en Castrogonzalo en la que se celebran cultos que consisten en leer y comentar la Biblia. En invierno se hacen representaciones cinematográficas a las que el público especialmente la juventud asiste porque la entrada es gratuita [...] A Torre del Valle va también el pastor de Castrogonzalo. Celebra el culto cada domingo en una casa particular donde al principio iba mucha gente por curiosidad, pero ahora se ha reducido a algunos enemigos del párroco. Los otros del pueblo ven con desprecio la acción protestante".
En 1932 se establece la Obra en Benavente, con la participación de Eduardo Thornton C. Turrall y otros colaboradores ingleses, como los misioneros Juan Biffen y Gabriel Bermejo. El punto de partida son una serie de conferencias celebradas en los locales del "Industrial Cinema", en la Rúa, en las que participan Arturo Shallis, Audelino González y otras personalidades. En el mes de febrero de este año el periódico "El Heraldo de Zamora" se hacía eco de la expectación creada en la ciudad con estas charlas:
"Se ha inaugurado con una serie de conferencias, la nueva Capilla evangélica en esta ciudad, a cargo del elocuente y culto pastor don Miguel Aguilera. La dirección de estos actos está a cargo del venerable don Arturo Shallis, de la Capilla del vecino pueblo de Castrogonzalo. Tanto la celebrada en el "Cinema Benavente", como las que se están celebrando en la Capilla de la plaza del capitán García Hernández, se han visto totalmente llenos los locales, de público distinguido".
La inauguración de esta capilla benaventana, en febrero de 1932, fue el momento elegido para inmortalizar a esta selecta y pintoresca comunidad con una foto de familia. En ella encontramos a prácticamente todos los protagonistas de nuestro relato. Acudieron, vestidos para la ocasión, al estudio de Pablo Testera, en la Plaza de Santa María. La foto fue publicada pocas semanas después en la revista "España Evangélica". El pie de foto reza: "Por tierras de Zamora. En Benavente se ha inaugurado hace unas semanas una capilla evangélica. En esta fotografía ofrecemos a algunos hermanos de dicha localidad y pueblos cercanos". Hemos podido identificar a buena parte de ellos. De otros tenemos algunas conjeturas, pero no certezas. De la foto original se hicieron varias copias, conservadas como reliquias por algunos de los familiares de los retratados. Otra copia se expone en la actualidad en la "Capilla Evangélica Asamblea de Hermanos" de Benavente, en la calle de Santa Rosa.
En junio de 1933 Arturo Shallis falleció durante un viaje a Inglaterra, con lo que Audelino González va a asumir gran parte de la responsabilidad en las funciones pastorales, al menos hasta la llegada de Gabriel Bermejo en noviembre de ese mismo año. Audelino había sido nombrado inspector veterinario municipal de Benavente en octubre de 1933. La noticia del fallecimiento inesperado de Arturo Shallis provocó una gran conmoción en toda la comarca. En la revista “Edificación cristiana” de Septiembre-Octubre de 1964 se publicó el testimonio del misionero Federico H. Gray sobre su ministerio en España. Grey puede considerarse otro de los pioneros en el área de Valladolid y Zamora, vinculado a la Iglesia Evangélica de los Hermanos y al Colegio Evangélico de Valladolid:
"El 19 de junio fuimos muy penosamente sorprendidos por un telegrama de Inglaterra anunciándonos que don Arturo Shallis había fallecido inesperadamente después de una operación, y pidiéndonos que comunicáramos esta triste noticia a su esposa, quien se hallaba en Castrogonzalo con su hijo, cuidando de la obra. Doña Josefina Greening se fue tan pronto como pudo a este pueblo para darles este penoso informe, y doña Elena Shallis y su hijo se dispusieron precipitadamente y marcharon a Inglaterra en seguida para estar presentes en el entierro, el segundo de este año".
Tras el fallecimiento de Arturo Shallis, parece que Eric Gabriel Bermejo (1896-1935) asumió sus funciones y se instaló definitivamente en el área de Benavente, viviendo con su familia en Castrogonzalo. Anteriormente había desarrollado su actividad en Asturias, colaborando con su cuñado Juan Biffen en la creación de una nueva capilla de Gijón. Casó con una italiana: Lidia Arnera, de la que tuvo tres hijos: un varón y dos mujeres. Murió en Castrogonzalo en abril de 1935, cuando apenas contaba con 39 años de edad. En junio de 1936 su viuda realizaba algunos trámites relacionados con la expedición del pasaporte de residencia. Poco después, en compañía de sus tres hijos, regresó a Inglaterra, probablemente huyendo de la guerra en España. El hijo varón: Eric Raphael Bermejo (1931-2019) siguió los pasos de su padre y ejerció también el ministerio evangelista. Había nacido en Gijón en 1931. Su actividad misionera se repartió por España, Inglaterra, Francia e Italia. En los escritos de Federico H. Gray también hay un recuerdo para el fallecimiento de Gabriel Bermejo en Castrogonzalo en 1935:
"El lunes, después del domingo de la gloriosa resurrección, recibimos la tristísima noticia del fallecimiento de nuestro querido hermano don Gabriel Bermejo, y, en seguida, me puse en camino para Castrogonzalo. Cuánta pena me causó entrar en aquella casa donde sólo diez días antes le había dejado relativamente bien, y ahora hallar una viuda con sus tres hijitos. El día siguiente se efectuó el entierro en medio de una lluvia torrencial, estando presentes don Juan Biffen, su cuñado; don Audelino González y un servidor y varios hermanos y amigos, pero el tiempo impidió que celebrásemos el acto como deseábamos, así arreglamos cultos memoriales en Castro y Benavente las noches siguientes. ¡Cuán incomprensibles son los caminos del Señor!, pero siempre nos doblegamos ante la santa voluntad de Dios...".
Con la muerte de Shallis y Bermejo, y el regreso de sus familias a Inglaterra, la dirección del núcleo protestante de Castrogonzalo pasó a recaer en vecinos nacidos en la propia población Pero esta situación se vio radicalmente alterada con el comienzo de la Guerra Civil. Durante los primeros meses de la contienda la comunidad protestante española sufrió los ataques de los sectores más intransigentes del Bando Nacional. En julio de 1936 fue clausurada la capilla evangélica de Castrogonzalo, propiedad de la "Continental Lands Company Ltd." y reconvertida temporalmente en local de Falange. Los dos principales líderes de la congregación en la localidad: Elías García Argüello y Antonio Rodríguez Gómez fueron detenidos y, poco después, asesinados. Se da la circunstancia de que ambos vecinos tenían un especial protagonismo en la vida municipal, pues el primero era el alcalde y el segundo concejal del Ayuntamiento.
Antonio Rodríguez Gómez había nacido en Castrogonzalo en 1872. Era viajante de comercio, y entre sus actividades conocidas se cuenta la compra de pelo natural por las localidades de la comarca, mercancía que luego, al parecer, llevaba a vender a Dublín. De su matrimonio con Clotilde Frey nacieron seis hijos, todos ellos portadores de nombres de personajes bíblicos: Josué, Jacob, Rubén. Abraham, Sara y Damaris. Vivió en una casa, hoy en ruinas, en la parte alta del pueblo, en la zona del Castillo, lo cual le permitía disfrutar de unas vistas privilegiadas sobre todo el caserío. Hombre de profundas convicciones religiosas, y con inquietudes políticas, dirigía frecuentemente propuestas al ayuntamiento para su discusión en los plenos. Escribía estas proposiciones de su puño y letra, en unas cuartillas cuadriculadas. Su estilo es apasionado y algo atropellado en su redacción. En alguna de ellas habla de su estancia anterior en Escocia, donde vivió varios años, e incluso se permite el lujo de incluir alguna cita en inglés. Ese carácter apasionado parece que dio lugar a momentos de tensión con otros concejales en los plenos de los meses finales de la II República.
Elías José García Argüello era también natural de Castrogonzalo. Había nacido el día 16 de febrero de 1888, siendo sus padres Evencio García Garrido y Luisa Argüello Valdés. Pertenecía a una familia de agricultores, dedicados principalmente al cultivo del viñedo. No tuvo descendencia de su matrimonio con Carolina Rodríguez, pero acogieron en su casa a una sobrina: Esther Rozada Rodríguez. Su vivienda familiar hacia esquina entre las calles Carrancha y Eras de Arriba. El paso de Elías por la alcaldía de Castrogonzalo fue efímero. Se limita a unos pocos meses del año 1936 y fue interrumpido trágicamente con su muerte. Relevó al anterior regidor: Mariano Huerga Fernández, después de las elecciones municipales de ese mismo año. Según la convocatoria de este proceso electoral, a Castrogonzalo, como municipio encuadrado en la horquilla entre los 1.001 y 2.500 habitantes le correspondía elegir a siete concejales, "cinco por la mayoría y dos por la minoría". El 24 de marzo se constituyó una comisión gestora que, tras votación entre sus miembros, eligió a Elías García Argüello como alcalde presidente y a Gabriel García Pastor como primer teniente alcalde.
En la documentación del Archivo Municipal y en el Boletín Oficial de Zamora podemos seguir el rastro de las actuaciones del nuevo alcalde entre los meses de marzo y julio de aquel año. En alguna de ellas encontramos una evidente sensibilidad hacia los problemas sociales. Así, con fecha 4 de abril hay un acuerdo de la corporación municipal para "participar a los panaderos en lo sucesivo el pan que pongan a la venta en esta Villa, ha de tener el peso de medio, uno o dos kilos", imponiéndose un correctivo a uno de estos panaderos de entregar "doce hogazas para los pobres". En un edicto del 14 de mayo se aprueba un crédito de 2.000 pesetas "para atender a los gastos del paro obrero, construyendo un canal que partiendo del río Esla desagüe en Carrancha". La última acta municipal que firma corresponde al día 23 de julio, cuando ya el alzamiento militar había triunfado en todo el territorio de la provincia de Zamora. En este día, siguiendo instrucciones del gobernador de la provincia, cesó la anterior comisión gestora y volvió a encabezar la alcaldía Mariano Huerga Fernández.
En el "Libro Diario del cementerio de Zamora. De 1927 a enero de 1947" constan las anotaciones de los enterramientos efectuados como consecuencia de las ejecuciones, sin ningún tipo de formalidad legal, durante estos dramáticos meses. La práctica habitual era sacar a determinados presos de las cárceles, con la excusa de un traslado a otra prisión, para llevarlos a continuación al cementerio de San Atilano. Entre las personas registradas el 30 de septiembre de 1936 encontramos a Elías García Argüello, de 47 años; Antonio Rodríguez Gómez, de 64 años, y Dalmacio Sampedro Rodríguez, de 46 años. Los tres figuran como vecinos de Castrogonzalo, se les asigna el sector del cementerio conocido como "Cuartel de San Clemente", y a los tres se les clasifica con la significativa circunstancia de "hallados muertos".
En estos primeros meses de guerra también fue asaltado el local de culto de Benavente. Un grupo de falangistas saqueó la capilla que la comunidad evangélica poseía en la actual Plaza de la Madera. Se quemaron públicamente las biblias e himnarios, se trasladaron los bancos a un café y el armonio a una iglesia católica. Audelino fue detenido por falangistas el 6 de agosto de 1936 y trasladado a Zamora. En la cárcel coincidió con numerosos detenidos de Benavente y su comarca, muchos de los cuales serían asesinados durante el otoño de ese mismo año. Sin embargo, Audelino tuvo mayor fortuna, pues el 4 de septiembre fue trasladado a la cárcel de Toro. El 6 de enero de 1937 fue puesto en libertad, después de todo tipo de peticiones y gestiones realizados por su esposa, Abigail Vidal Somoza.
A propósito de todos estos trágicos sucesos hemos podido recoger el valioso testimonio oral de Esther Rozada Rodríguez, sobrina de Elías García Argüello. En la actualidad vive en León y tiene 91 años. Esther recuerda sus años de niñez en Castrogonzalo, donde vivió en compañía de su tío y de su esposa Carolina Rodríguez. Siguiendo una costumbre muy arraigada en la zona, era muy habitual que en las familias numerosas alguno de los hermanos pasara su infancia con otros familiares sin hijos. Según relata, Elías fue agricultor, y ella misma, como el resto de familiares colaboraba en las labores agrícolas: "Tenia viñedos y íbamos a coger uvas [...] Fue agricultor por herencia de su padre". Vivieron en una casa del Barrio de Arriba, en la Calle de las Eras: "Vivíamos cerca de la Plaza de la Laguna, que tenía entonces agua, en una calle que iba al cementerio nuevo".
Sobre la detención, encarcelamiento y muerte, el testimonio concuerda con otros casos similares recogidos en la provincia: "Yo tenía 6 años. A mi tío le trataron bien. A mi tía le dijeron que se lo llevaban para prestar declaración. A ambos los llevaron en un pequeño camión". Durante la estancia en la cárcel de Zamora había comunicación con la familia a través de cartas "porque les ayudaban los carceleros. Un día llamaron y le dijeron que fueran a recoger la ropa por que habían sido ejecutados. Las mujeres (Clotilde, esposa de Antonio y Carolina) tenían miedo de ir, pero al final fueron". La Capilla sufrió también las iras de los grupos más exaltados: "Recuerdo como los falangistas sacaron las biblias y las quemaron en la calle, y como dejaron los fusiles dentro de la capilla". En todo caso, recuerda que esta no fue la primera sede evangélica establecida en la localidad. Hubo una capilla anterior, situada junto a la casa de Elías: "enfrente de nuestra casa, en la Panera. Allí es donde empezó todo".
La cuestión de las propiedades británicas incautadas a los evangélicos y el trato dado a los misioneros ingleses dio lugar a quejas por parte de su Embajada en España. Con fecha 16 de junio de 1936 el Gobierno Civil de Zamora remite un oficio al Ayuntamiento de Castrogonzalo comunicando que: "El Sr. Cónsul de Inglaterra en Vigo, da cuenta a este Gobierno de su inquietud, con motivo de las frecuentes alteraciones de orden público acerca de la seguridad de la Capilla evangélica, con casa habitación, existente en esa localidad y que es propiedad del súbdito británico D. J.H.H. Biffen; por lo que requiero a V. para que, como primera autoridad local, vele en pro de los intereses británicos y proteja a los individuos de tal nacionalidad que residen en ese pueblo".
Este Biffen debe ser identificado con Juan o John Biffen (1893-1960), uno de los principales misioneros ingleses asentados en España, en este caso establecido en Gijón. Su llegada a nuestro país, en compañía de su esposa Margarita Biffen, se sitúa en torno al año 1921. Fue una figura crucial en el proyecto de dotar a la congregación evangélica de esta villa asturiana de una capilla propia, concretamente en el barrio del Llano. La labor social le hizo muy conocido en la ciudad, y era frecuente verle pasear por sus calles con sus hijas. Como ya se indicó anteriormente, era cuñado de Gabriel Bermejo y, por tanto, también estaba ligado al núcleo protestante de Castrogonzalo. Participó en la inauguración de la capilla de Benavente en 1932. Durante la Guerra Civil regresó a su país, donde organizó la acogida de varios niños de familias protestantes españolas. El 19 de noviembre de 1937 un grupo de niñas fueron recibidas por Biffen, y otros misioneros, en el Castillo de Moorlands, en Merriot. Esta campañas de ayuda estaban dirigidas por el Spanish Evangelical Refugee Home y la Alianza Evangélica Inglesa.
Juan Biffen aparece en diversos documentos como representante o apoderado de la "Continental Lands Company Ltd.". Esta compañía británica se convirtió en la depositaria y gestora del patrimonio de las "Asambleas de hermanos" pues, al igual que las restantes congregaciones protestantes, carecían de personalidad jurídica ante las leyes españolas. Esta formalidad otorgaba mayor protección legal y seguridad a sus propiedades. La estrategia demostró su efectividad para reclamar su devolución al concluir la guerra. Bajo la cobertura del gobierno británico, se suceden las gestiones en los años cuarenta para la defensa de los intereses de los protestantes. En una nota presentada por el embajador Samuel Hoare el 25 de marzo de 1944 se hace alusión a los atropellos sufridos por capillas e inmuebles en diversos lugares. En Puertollano (Ciudad Real), Villaescusa y Castrogonzalo (Zamora) y Toral de los Guzmanes (León), las capillas protestantes: "... han sido clausuradas o requisadas, al mismo tiempo que se ha negado a los miembros de dichas comunidades el derecho a reunirse para cumplir con sus deberes religiosos".
La llamada "Capilla de los protestantes" estuvo instalada en un local situado en la calle Encuentro, por bajo del cerro sobre el que se asienta la iglesia de San Miguel Arcángel. Era un edificio modesto, de una sola planta, tejado a cuatro aguas y con un patio interior. A pesar de su sencillez, contaba con los elementos básicos para atender el culto, entre ellos una gran pila semienterrada en la que se realizaban los ritos del bautismo por inmersión. Su forma era rectangular, de 3 x 2 metros aproximadamente, con unos escalones para el acceso del pastor y el neófito. La sala principal estaba divida en dos sectores, separados por puertas. Los muros de la capilla se levantaron con adobes. De las tres ventanas abiertas, dos se asomaban a la calle principal, mientras que la otra miraba hacia un callejón que subía a la iglesia de San Miguel.
Sobre la puerta de entrada existió un cartel de obra donde se leía "El Plantel". Ese fue el nombre con el que se conoció popularmente la edificación entre los vecinos. Después del cierre al público, el local fue ocupado por Falange y, más tarde, fue la sede del "Teleclub". A principios de los años 80 se arruinó, quedando convertido en un solar sin edificar con una extensión de 263 metros cuadrados.
APÉNDICE GRÁFICO Y DOCUMENTAL
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Grupo de niños en la Capila Evangélica de Castrogonzalo (Archivo Gráfico Documental Evangélico) |
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La llamada Capilla de los protestantes en una foto aérea de Castrogonzalo del año 1983 |
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Solar en el que estuvo situada la llamada "Capilla de los protestantes" de Castrogonzalo |
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Panera en la que estuvo instalada la primera capilla de la comunidad protestante de Castrogonzalo |
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Firma de Elías García, fechada en 1916, en una bodega de Castrogonzalo |
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"España Evangélica", 1922. |
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Un entierro en Castrogonzalo, "España Evangélica", 1930. |
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Noticia publicada en el Heraldo de Zamora sobre la apertura de la Capilla evangélica de Benavente (año 1932) |
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1933 Por tierras de Zamora - España Evangélica 1933 |
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Cartera de inspector veterinario municipal de Benavente de Audelino González Villa (año 1933) |
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Partida para construir un canal en Carrancha (año 1936) |
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Diario Oficial de Zamora (22 julio de 1936) |
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Firma de Elías García como alcalde de Castrogonzalo en 1936 |
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Firma de Antonio Rodríguez Gómez en 1936 |
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Comunidad evangélica de Benavente y Comarca (1932) |
AGRADECIMIENTOS:
Joaquín García Neches, José Ángel Mazón Juárez, Santiago Pérez Escudero, Esther Rozada Rodríguez, Tomás Rozada Rodríguez, Esther Rozada Varela, Rafael Jiménez Rosillo, Luis Fernández González, Herminio Peña Echeverría, Capilla Evangélica Asamblea de Hermanos de Benavente, Ayuntamiento de Castrogonzalo.
BIBLIOGRAFÍA:
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